El posible impulso de la tokenización de activos reales
A pesar del panorama desafiante, Standard Chartered identifica una oportunidad de recuperación para Ethereum en la tokenización de activos del mundo real (RWA). El sólido marco de seguridad de la red y su historial probado de actualizaciones podrían permitirle conservar hasta un 80% de la cuota de mercado en este sector emergente. De concretarse, este impulso ayudaría a contrarrestar la “pérdida estructural de valor” que la banca ve en la competencia con las capas 2.
No obstante, la institución es clara al anticipar que la paridad de ETH frente a BTC —conocida como la relación ETH/BTC— podría caer hasta 0,015 para fines de 2027, un nivel no visto desde 2017. En la visión del banco, Ethereum seguirá “rezagado” respecto a Bitcoin, aun cuando su precio se beneficie de futuros repuntes liderados por la criptomoneda de referencia.
Propuestas de cambio: ¿gravar a las capas 2?
En el mismo informe, el jefe de investigación de activos digitales de Standard Chartered, Geoff Kendrick, sugiere que la Ethereum Foundation (EF) podría plantearse un cambio en su enfoque comercial, por ejemplo, imponiendo tasas o impuestos a las soluciones de capa 2 que aprovechan la seguridad de la red principal. Sin embargo, Kendrick considera que la EF difícilmente alterará su filosofía de código abierto y gratuidad para los validadores de capa 2, lo que, según su criterio, prolongará la tendencia de salida de valor hacia estas redes secundarias.
El nuevo horizonte: Pectra y los próximos pasos
Mientras tanto, Ethereum cotiza en torno a 1.900 dólares, un leve incremento en las últimas 24 horas, pero aún mantiene una caída de casi el 42% en lo que va de año y de un 60% respecto a su máximo histórico.
En el horizonte inmediato figura la actualización Pectra, prevista para el mes próximo. Se espera que este upgrade incluya mejoras en el rendimiento de la red y en la participación de validadores, además de la introducción de funcionalidades como EIP-7702 y EIP-7251. El éxito de estas novedades podría convertirse en un factor decisivo para la evolución del precio y la percepción general de Ethereum en el mercado.
Una proyección mucho más cauta
No es la primera vez que Standard Chartered ajusta sus proyecciones. El año pasado, anticipaba que Ethereum alcanzaría 8.000 dólares a finales de 2023 y 14.000 dólares hacia 2025, con las aprobaciones de fondos ETF al contado en Estados Unidos y la actualización Dencun como catalizadores principales. Incluso a inicios de este año, el banco vaticinó que ETH tocaría los 10.000 dólares en un entorno más favorable propiciado por la «nueva administración» estadounidense.
La realidad, sin embargo, se presenta más compleja. El informe resalta que, pese a mantener un papel predominante en muchos segmentos —sobre todo en el ámbito de los contratos inteligentes—, la competencia y la descentralización inherente a Ethereum han derivado en la aparición de nuevas soluciones que retan su primacía. La comunidad, los desarrolladores y, sobre todo, la Ethereum Foundation se enfrentan a un dilema: encontrar vías para proteger la economía de la capa principal sin traicionar los valores fundamentales de la red.
En definitiva, Ethereum se encuentra ante una encrucijada: la innovación constante y su marco de seguridad podrían apuntalarla en el largo plazo, pero deberá superar el desafío de las capas 2 para seguir siendo la columna vertebral del ecosistema cripto. Standard Chartered, por su parte, adopta un tono más cauto: contempla un rebote parcial de la mano de Bitcoin, pero estima que Ethereum seguirá rezagado y no alcanzará los niveles de precio que anticipó en sus pronósticos más optimistas.