El lanzamiento del nuevo ETF de economía digital por parte de VanEck marca un paso importante en la evolución de los productos financieros que buscan exponer a los inversionistas tradicionales al ecosistema cripto. Aprobado por la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC), el fondo se llama VanEck Onchain Economy ETF (NODE) y estará disponible a partir del 14 de mayo de 2025.
Este ETF no se limita a replicar el precio de bitcoin o ether, como hacen los fondos al contado. En cambio, adopta una gestión activa y diversificada, enfocándose en un portafolio de entre 30 y 60 acciones de compañías que forman parte de la economía digital descentralizada.
¿Qué empresas incluye NODE?
Según detalló Matthew Sigel, director de investigación de activos digitales de VanEck y administrador del fondo, NODE abarcará una amplia gama de empresas agrupadas en sectores clave:
Exchanges de criptomonedas, como Coinbase o Robinhood
Empresas de minería de bitcoin y operadores de centros de datos
Fabricantes de hardware, incluidos los vinculados a chips, ASICs y semiconductores
Proveedores de infraestructura energética para redes blockchain
Empresas del sistema financiero tradicional que ofrecen custodia o servicios asociados a cripto
Compañías de consumo masivo y videojuegos que integran tecnología Web3
Gestores de activos con exposición cripto, como MicroStrategy
Además, NODE podrá destinar hasta un 25% de su cartera a fondos cotizados (ETP) que siguen directamente el precio de bitcoin (BTC) y ether (ETH). Incluso podrán incluir acciones de empresas que mantienen criptomonedas en su balance, brindando así una exposición indirecta a los activos digitales.
Un ETF dinámico, con gestión activa
A diferencia de los fondos indexados tradicionales, el ETF de economía digital de VanEck será gestionado activamente. Esto significa que será el propio Sigel quien decidirá qué empresas incluir, cómo ajustar las asignaciones y en qué proporciones rotar el portafolio según la evolución del sector.
NODE tendrá una tarifa de administración del 0,69% anual (69 puntos básicos), lo que refleja tanto su gestión especializada como su alcance sectorial. La comisión se deducirá automáticamente del valor del fondo.
Esta estrategia busca capturar el potencial de crecimiento de un sector en rápida transformación, pero sin limitarse a seguir un índice fijo. El fondo podrá ajustarse a nuevos actores o tecnologías emergentes, ofreciendo a los inversores mayor flexibilidad ante cambios de mercado.
El respaldo de VanEck
VanEck no es nueva en el terreno de los activos digitales. La firma ya administra productos como el VanEck Bitcoin ETF (HODL) y el Ethereum Trust (ETHV), y recientemente fue la primera en presentar ante la SEC una propuesta para lanzar un ETF de Solana (SOL) en Estados Unidos.
Este historial consolida su posición como uno de los gestores más proactivos en el desarrollo de herramientas de inversión para la economía descentralizada. Con NODE, VanEck no solo expande su oferta, sino que reafirma su visión de que el cripto no es solo un activo, sino una economía entera en construcción.
¿Por qué importa este fondo?
La aprobación del ETF NODE llega en un momento clave, donde los inversores buscan formas diversificadas de exponerse al crecimiento del sector cripto, sin asumir la alta volatilidad de los tokens individuales.
A través de acciones de empresas reguladas y productos bursátiles tradicionales, NODE permite participar en la adopción de tecnologías blockchain, desde infraestructura hasta casos de uso cotidiano, como los videojuegos con NFTs o los pagos globales basados en stablecoins.
Además, se convierte en una alternativa atractiva para los fondos institucionales, fondos de pensiones y carteras diversificadas que aún no pueden invertir directamente en criptomonedas por restricciones regulatorias o políticas internas.
El ETF de economía digital lanzado por VanEck representa una evolución en la forma de invertir en el mundo cripto: más allá de los tokens, se apuesta por los cimientos empresariales que lo sostienen. NODE se posiciona como un vehículo estratégico para captar valor de largo plazo en una industria que ya no es solo promesa, sino infraestructura en expansión.
Con la bendición de la SEC y un portafolio diseñado para moverse con agilidad entre los distintos vértices del ecosistema Web3, este ETF podría marcar un nuevo estándar para la inversión institucional en la economía digital del futuro.