En un anuncio sin precedentes, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, reveló la inclusión de varias criptomonedas en la primera Reserva Estratégica de Criptomonedas del país. El comunicado, emitido a través de la plataforma Truth Social, detalla que XRP, Solana (SOL) y Cardano (ADA) formarán parte de esta iniciativa, con el objetivo de fortalecer la posición de EE.UU. en el sector de los activos digitales.
Un giro inesperado en la política cripto de EE.UU.
La decisión de Trump marca un cambio significativo en la política gubernamental hacia las criptomonedas. En su publicación, el mandatario enfatizó que su administración busca impulsar la industria cripto tras años de regulaciones restrictivas bajo la gestión de Joe Biden.
«Una Reserva Cripto de EE.UU. elevará esta industria crítica tras años de ataques corruptos por parte de la Administración Biden. Mi Orden Ejecutiva sobre Activos Digitales instruyó al Grupo de Trabajo Presidencial a avanzar con una Reserva Estratégica Cripto que incluya XRP, SOL y ADA», declaró Trump.
Inicialmente, la falta de menciones a Bitcoin (BTC) y Ethereum (ETH), las dos criptomonedas con mayor capitalización de mercado, generó desconcierto entre los entusiastas de estos activos. Sin embargo, poco después, el presidente aclaró que tanto BTC como ETH también formarán parte de la reserva.
Impacto en los mercados cripto
El anuncio de Trump tuvo un efecto inmediato en los mercados de criptomonedas. ADA experimentó un aumento del 63% en solo dos horas, mientras que SOL subió un 23% y XRP un 32%. Esta reacción refleja el entusiasmo de los inversores ante la posibilidad de una mayor adopción institucional de estos activos.
Sin embargo, el anuncio también generó reacciones mixtas. Mientras que los seguidores de XRP, ADA y SOL celebraron la decisión, los partidarios de Bitcoin y Ethereum expresaron su sorpresa inicial al no haber sido incluidos en el comunicado original.
La estrategia detrás de la Reserva Cripto
Trump ha discutido la idea de una reserva estratégica de criptomonedas desde su campaña presidencial de 2024. Al asumir la presidencia en enero de 2025, firmó una orden ejecutiva que instruía a un grupo de trabajo a evaluar la creación de un «stockpile» de activos digitales.
El senador Cynthia Lummis ha promovido previamente una propuesta similar centrada exclusivamente en Bitcoin, sugiriendo que el Tesoro de EE.UU. adquiriera un millón de BTC en un lapso de cinco años. Sin embargo, la nueva iniciativa de Trump expande el concepto, incorporando otros activos digitales en la ecuación.
Vinculaciones políticas y empresariales
Uno de los puntos que ha llamado la atención es la relación del White House Crypto & AI Czar, David Sacks, con el ecosistema Solana. Sacks es un inversor limitado en Multicoin Capital, firma que respalda proyectos basados en esta blockchain. Además, en 2021, declaró ser «hodler» de SOL, lo que ha generado preguntas sobre posibles intereses personales en la selección de criptomonedas para la reserva.
Por otro lado, Ripple, la compañía detrás de XRP, ha estado en una prolongada batalla legal con la SEC, lo que podría explicar su interés en reforzar lazos con la administración Trump. En los últimos meses, Ripple ha aumentado su influencia en Washington a través de donaciones a Fairshake, un super PAC pro-cripto, y a la inauguración presidencial de Trump en 2025.
Próximos pasos: cumbre de la industria cripto
Para avanzar con la implementación de la reserva, el Grupo de Trabajo de Activos Digitales organizará una cumbre el próximo viernes con representantes del sector cripto y del gobierno. Esta reunión podría definir el marco regulatorio y los mecanismos de adquisición de activos digitales para la reserva.
Mientras tanto, la decisión de Trump ha dejado en claro que su administración busca posicionar a EE.UU. como el líder mundial en el sector cripto. Con un mercado en constante evolución, queda por ver cómo esta iniciativa impactará en la regulación y en la adopción institucional de las criptomonedas en el país.