El regreso del riesgo calculado
Andre Cronje, figura emblemática del ecosistema cripto y cofundador de Sonic, volvió a sorprender al mercado este 25 de marzo al anunciar planes para lanzar una nueva stablecoin algorítmica en un plazo de cinco semanas. La propuesta llega con una promesa ambiciosa: rendimientos anuales superiores al 19% una vez que el proyecto supere los mil millones de dólares en valor total bloqueado (TVL, por sus siglas en inglés).
Cronje, conocido por su papel clave en Fantom y por su tendencia a innovar en terrenos complejos, hizo referencia directa a los riesgos históricos de este tipo de activos. “Estoy bastante seguro de que nuestro equipo resolvió el problema de las stablecoins algorítmicas hoy, pero el ciclo anterior me dejó con tanto PTSD que no estoy seguro de si deberíamos implementarlo”, declaró el pasado 20 de marzo, evocando el colapso de TerraUSD (UST), cuyo fracaso arrastró consigo alrededor de 40.000 millones de dólares en pérdidas.
Altos rendimientos, cautela técnica
Pese a su inicial reticencia, Cronje compartió avances técnicos importantes. El 22 de marzo publicó una prueba de concepto que mostraba un rendimiento estimado del 200% anual con solo 10 millones de TVL, descendiendo a 23,5% con 100 millones y estabilizándose en torno al 4,9% por encima del umbral de los mil millones.
Dos días más tarde, el equipo logró una optimización significativa: “Yohaan acaba de encontrar una forma de llevar esto al 95,9% APY con 100 millones de TVL, y al 19,18% con más de mil millones”, escribió Cronje. Esta curva de rendimiento sugiere un sistema de retorno variable basado en niveles de liquidez, que premia a los primeros en entrar con mayores beneficios.
No obstante, hasta el momento no se han revelado detalles concretos sobre la mecánica algorítmica, el respaldo colateral ni los controles on-chain que garantizarían la estabilidad del activo. La opacidad, combinada con los altos retornos proyectados, genera una mezcla de entusiasmo y escepticismo en el sector.
Un mercado en expansión
Sonic, la red de capa uno que Cronje está impulsando, busca posicionarse como un entorno de alta performance orientado a las finanzas descentralizadas. La incorporación de una stablecoin propia se perfila como un paso estratégico para consolidar su ecosistema.
El contexto acompaña: el mercado global de stablecoins superó recientemente los 230 mil millones de dólares. Tether (USDT) lidera con 145 mil millones en capitalización, seguido por USD Coin (USDC) con 58 mil millones. Pero hay espacio para nuevos jugadores. El caso de USDe, otra stablecoin algorítmica desarrollada por Ethena Labs, es ilustrativo: en apenas un año, pasó de 1.300 millones a más de 5.400 millones en capitalización.
¿Reinvención o repetición?
La apuesta de Cronje se sitúa en la delgada línea entre la innovación disruptiva y el déjà vu del colapso de Terra. Aunque los rendimientos proyectados son llamativos, el recuerdo del impacto sistémico de UST aún pesa sobre la memoria colectiva de los inversores.
Con cinco semanas por delante para conocer los detalles técnicos del nuevo modelo, la expectativa es alta. La pregunta sigue abierta: ¿estamos ante una verdadera evolución en las stablecoins algorítmicas o ante un nuevo experimento con potencial explosivo?